Testimonios una luz en la noche (II)

por obradoiros

Jose, diácono de Ourense:

Mi segunda Luz en la Noche tras la inolvidable experiencia en Ourense y una vez más Jesús no deja de sorprender!!!
Para mí ha sido un día para compartir la fe con otros jóvenes valientes que no se avergüenzan de seguir a Cristo en sus vidas. De nuevo he aprendido de vosotros, jóvenes, que se puede ser profundamente moderno y profundamente cristiano!!!
En esta ocasión me ha sorprendido gratamente la cantidad de gente que se ha confesado o ha acudido a hablar con un sacerdote. Todos hemos podido comprobar cómo los jóvenes, incluso los que dicen no creer en nada, están hambrientos de la Misericordia de Dios!!! Y saben que los sacerdotes son los dispensadores de esa Misericordia, a pesar de los tiempos que corren, en los que oímos tantas cosas malas contra los curas, vemos cómo en ellos se sigue buscando a Jesucristo!!!
Finalmente, como intercesor del grupo de acogida me he sentido profundamente recompensado experimentando el valor de la oración de intercesión y sintiendo como en la oración todos estamos unidos y el Señor escucha siempre nuestras súplicas aunque solo Él sabe cómo responder a ellas. La oración es ese oasis en el que todos descansamos unidos en el Corazón de Cristo!!! 



Doy gracias a Dios por esta Luz en la Noche. Gracias a todos vosotros jóvenes cristianos por vuestro testimonio y gracias a los sacerdotes por su entrega. Hoy y siempre vale la pena ser sacerdote y hacer de canal para que la Misericordia de Dios llegue a la humanidad sedienta de perdón!!! Creo que esta es la gran lección que nos deja esta experiencia en Ferrol, por ello, vale la orna que todos los chicos que habéis participado os preguntéis y, sobre todo, le preguntéis al Señor: yo sacerdote??? Y por qué no???
Ester Palma
Misionera Servidores del Evangelio de la misericordia en Corea del sur:

Era la primera vez que participaba,
me gustó que casi todo era llevado por los mismos jóvenes, 
sostenidos, por los curas, las religiosas, las misioneras…las mamás…
me gustó que fuera interdiocesano, 
me gustó el ambiente …la comidita…el chocolate…los testimonios…
la delegación de ferrol, super chula!
y me encantó el iniciar la actividad rezando y con la oportunidad para confesarse.
Me tocó el ministerio de interceder por la música…
desde el principio lo viví con ilusión, fuerza y alegría, 
con la máxima concentración posible para mandarles fuerza por el Cuerpo de Cristo…
rezaba para que no tuvieran frío,
para que lo disfrutaran, 
para que Dios pasara por su voz, música, flauta…
rezaba por los que venían…

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