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Para mi Fátima ha sido una experiencia súper especial, no pensaba que la Virgen fuera a salir a mi encuentro pero salió y en un momento donde lo necesitaba con urgencia ya que me sentía muy débil como cristiano y como persona. La vigilia me la pase toda llorando porque pude sentir a la Virgen que me hablaba a mi corazón y me daba esa fuerza que necesito y que me faltaba. Sentir a la Virgen fue el mejor regalo que me podían haber hecho y que en mi corazón me dijera ella que “nunca me abandona, que no me preocupe porque ella va a estar conmigo siempre ,que me conoce y que le deje reinar en mi corazón”, que resonaran estas palabras en mi corazón hizo que me sintiera super lleno del amor de María, el amor de mi madre, con la fuerza que en este momento necesito y para más, la fuerza de María. Una madre que siempre está ahí aunque a veces nos olvidemos de que le estamos haciendo daño, que sufre por todos los pecados del mundo, por eso os digo que dejéis que la Virgen reine en vuestros corazones porque ella va a obrar siempre cosas buenas en cada uno de nosotros. ” Mi Inmaculado Corazón triunfará”.