HACIA LA JMJ
Buenos días, amigo joven que vas a iniciar la peregrinación hacia la JMJ de Cracovia:
en cuenta a la hora del viaje que iniciarás en los próximos días.
En primer lugar invitarte a que en estos días pidamos de una manera más intensa por los frutos de la JMJ, en especial, para que el Señor despierte en tu corazón y en el de los demás jóvenes el espíritu de entrega, de amor, y de esperanza. Que en estos días se provoque un encuentro entre el Señor y tú, que te transforme y te lleve a vivir tu juventud con autenticidad, con libertad, desde la fe y abierto a un mundo en continuo cambio que precisa de verdaderos testigos de esperanza.
Por ello, lo principal, lo más importante de esta peregrinación, es que abras tu corazón. Que te olvides de prejuicios y derrotismos, y te expongas a la esperanza. Van a ser unos días intensos, duros, llenos de pequeños obstáculos, pero días donde te vas a encontrar contigo mismo. Días donde te vas a encontrar con otros jóvenes que están como tú.., en continua búsqueda. Y en esa búsqueda te aseguro que te vas a encontrar con Él.
Por lo tanto… primera indicación:
Lo segundo: disfruta de cada momento. Vas a vivir experiencias nuevas, a descubrir ciudades en las cuales nunca habías estado. Con su historia, con todo lo positivo y negativo que se encierran tras su muros… pero tras ella, la vida de hombres y mujeres que desde el silencio, desde su oración y entrega, quisieron aportar a este mundo, a su país, a su ciudad, esa esperanza que hoy espero de ti, que hoy el mundo espera de ti.
Lo tercero: Ama y déjate amar. Vivirás con familias y quizá no te entiendas por el idioma, pero hay un modo de expresarse que no falla: el lenguaje del amor. Ama estos días, y déjate amar. Son muchas las familias, los jóvenes, que están preparando con tanta ilusión cada detalle para que te sientas acogido, amado, que no podemos quedarnos en las pequeñas derrotas que se puedan dar… y que se darán. Ama y mira cómo te aman. Han sido muchos meses preparándolo todo, para que tú ahora lo puedas disfrutar y te sientas amado. Así que por favor, AMA.
Lo cuarto: no des nada por hecho, da tu más. Cuando vives una experiencia con tanta gente, es fácil, dejarse llevar. Si algo nos diferencia cuando nos unimos tantos jóvenes por nuestra fe, de otros encuentros, es que siempre hay alguien que quiere dar un poco más de sí para ayudar al otro, para contribuir para que todo salga bien… ¿por qué? Porque brota de un corazón joven, que se sabe amado y que quiere amar. Esto es Jesucristo. Y es lo que quiere que tu hagas estos días.
Lo quinto: Escucha, pero por supuesto, actúa. Serán tantas las experiencias, tantas las palabras, los testimonios que vivirás, que no se puede quedar en un buen recuerdo. Hay que llevarlo a la vida. Y es más, cuando vuelvas, y estés en el día a día, serán muchos los que sin decirte nada, estará esperando que actúes. Así que mantén tus oídos abiertos, pero sobretodo actúa. Amigo joven: te veo en la peregrinación, te veo en Cracovia, pero sobretodo te espero y te veo a la
