El pasado 25 de Marzo tuvo lugar la Tienda del Encuentro, esta ocasión nos hemos ido a Aldán. Como es habitual comenzamos a las 17:30 con los juegos de presentación, donde la finalidad que se persigue es que los chavales se conozcan entre ellos y pasen un rato muy divertido.
Luego de pasar un rato muy entretenido, pasamos al momento del tema que se iba a tratar. En esta ocasión el tema escogido fue el de los talentos con el que queríamos que los adolescentes descubrieran que es lo que ofrecer al mundo, que dones o talentos tenían ellos y que a lo mejor aún no eran conscientes que los tenían.
Para comenzar con el tema pues preparamos un vídeo de Got Talent España donde se mostraba una experiencia de un chico de 13 años que en un accidente de camión había perdido su pierna pero como a pesar de esa situación física que lo privaba de muchas cosas, como el chaval quería mostrar al mundo que a pesar de su dificultad el podía mostrar su talento, en este caso hacer parkour, y dar una lección al mundo de que todo es posible y de que los dones que cada uno tiene es realmente bueno utilizarlos y mostrarlos a las personas.
Después de esta gran lección se dio paso a la dinámica de grupo, entonces se dividieron a los jóvenes en grupos de la misma edad acompañados de un catequista.
En esta ocasión a mi me tocó hacerme cargo de un grupo de adolescentes por primera vez, yo pensaba que no lo iba a llevar bien porque normalmente me dedico a tratar más con niños pequeños, pero me sentí muy a gusto y me di cuenta que también puedo llegar a los más jóvenes .
A continuación, se dio paso a la merienda, momento para seguir conociéndose, donde cada catequista pues conversó con sus compañeros/as de la tarea de llevar el mensaje de Jesús a sus catecúmenos, un momento donde los adolescentes pues seguían conociendo a los demás jóvenes y todo acompañado de música tradicional gallega que los propios jóvenes se animaron a tocar y cantar.
Por último, se dio paso al momento más importante de todo el encuentro, que era el encuentro con Jesús, donde cada uno de los chavales y catequistas iban a tener oportunidad de mostrarse ante Jesús y mostrarle también a Jesús aquello que tenían, aquello que les preocupaba, aquello que le quisieran decir a Jesús. Como siempre fue un momento increíble para mejorar la relación con Dios, esa relación tan única y tan especial y de la cual tenemos la oportunidad de tener.
¡Gracias Señor por estar siempre ahí!
Diego Piñeiro
