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“Dios, Padre
misericordioso,
misericordioso,
que has revelado tu amor
en tu Hijo Jesucristo
en tu Hijo Jesucristo
y lo has derramado sobre
nosotros en el Espíritu Santo, Consolador,
nosotros en el Espíritu Santo, Consolador,
te encomendamos hoy el
destino del mundo y de todo hombre” (1)
destino del mundo y de todo hombre” (1)
Te encomendamos en modo
particular
particular
los jóvenes de toda
lengua, pueblo y nación.
lengua, pueblo y nación.
Guíales y protégeles en
los complejos caminos de hoy
los complejos caminos de hoy
y dales la gracia de poder
cosechar abundantes frutos
cosechar abundantes frutos
de la experiencia de la
Jornada Mundial de la Juventud de Cracovia.
Jornada Mundial de la Juventud de Cracovia.
Padre celestial,
haznos testigos de tu
misericordia.
misericordia.
Enséñanos a llevar la fe a
los que dudan,
los que dudan,
la esperanza a los desanimados,
el amor a los
indiferentes,
indiferentes,
el perdón a quien ha
obrado el mal
obrado el mal
y la alegría a los
infelices.
infelices.
Haz que la chispa del amor
misericordioso
misericordioso
que has encendido dentro
de nosotros
de nosotros
se convierta en un fuego
que transforma los corazones
que transforma los corazones
y renueva la faz de la
tierra.
tierra.
María, Madre de
Misericordia, ruega por nosotros.
Misericordia, ruega por nosotros.
San Juan Pablo II, ruega
por nosotros.
por nosotros.
(1) Juan Pablo II, Homilía
para la Consagración del Santuario de la Misericordia Divina, Cracovia, 17
de agosto de 2002.
para la Consagración del Santuario de la Misericordia Divina, Cracovia, 17
de agosto de 2002.